sábado, 13 de enero de 2007

Correspondencia weblog: No lo soñé...

Estimado Deliverio Gillette, ha revelado usted un error conceptual en mi ensayo; lo celebro, porque sin darse cuenta ha echado un manto de duda sobre las correcciones y evaluaciones académicas.
Este trabajo que ha leído y que con tanto acierto ha corregido,bastante tiempo atrás, fue leído y calificado por personas "idóneas" que no han detectado el error.
¡Caramba! Durante nuestro paso por la escuela, luego por la universidad,¿a cuántas evaluaciones fuimos sometidos? A cientos y cientos, si los multiplicamos por la cantidad de años de vida lectiva.
¿Cuántas veces habrán juzgado un trabajo con la suficiente dedicación y cuidado? Es lógico que nos estemos planteando esto, porque ahora todo nuestro pasado estudiantil está bajo la lupa.
Se duda de todo porque no siempre hemos sido corregidos con resultado favorable, pero si algo que estaba en parte mal fue evaluado como muy bueno, quién nos garantiza que cuando algo fue calificado como muy malo, realmente lo fuera.
El mito de que el maestro nunca se equivoca, ha sido desmitificado gracias a usted.
Hoy sólo sé que no sé nada.